Paparazzis captaron a la actriz en su peor momento.
Lindsay Lohan fue captada en Hawai con un rostro que dejaba mucho que desear, justo ahora que la polémica estaba sobre ella por la sesión fotográfica que apareció en la revista Playboy.
Al parecer las drogas y el alcohol le habrían pasado la cuenta a la pobre Lindsay, porque su rostro lucía demacrado y aparentaba muchos más años de los 25 que en realidad tiene.
Debido a los actuales rasgos acabados de la actriz, muchos comenzaron a especular que las perfectas fotografías que se tomó para Playboy se lograron solo gracias al photoshop.
Dejar una contestacion